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Defensa personal

Cuando se mencionan a las artes marciales algunas personas se imaginan la fuerza del cuerpo, el uso de espadas, katanas, patadas, rompimientos de tablas, combates, etc. Sin embargo, algo interesante es que estas disciplinas, como el Taekwon-do son de naturaleza defensiva que puede ser aplicada ante una conducta criminal y es reconocida legalmente en muchas partes del mundo.


El usar técnicas para la protección se considera un derecho fundamental e inalterable de la ley natural. Es un instinto de supervivencia. A la vez está ligado con la moralidad. Este es un aspecto importante que incorpora la psicología humana.


Autopreservarse, por temor a la muerte, implica también un razonamiento respecto al tiempo de vida que se puede llegar a ganar al intentar salvarse. Pero es muy importante conocer de forma estratégica cómo poder hacer efectiva esta decisión y los tipos de defensa personal que se conocen.


Para las mujeres, que suelen ser de menor tamaño, y pueden tener menor fuerza física que los hombres (caben excepciones) pueden llegar a sentir una necesidad vital de defenderse, especialmente bajo situaciones de vulnerabilidad (como caminar sola por algún sector de la ciudad). Por ello, las técnicas de defensa que se pueden emplear pueden venir de varios estilos de artes marciales y tener el objetivo de protegerse contra atacantes. Son útiles las maniobras evasivas, para evitar la pelea y la confrontación y alejarse de la situación de peligro con agilidad.


Por otro lado, la defensa personal policial es un componente vital de entrenamiento de supervivencia para oficiales. De hecho es importante que se enfrenten al peligro del mundo, que es tan impredecible hoy en día, con conocimientos de defensa ante encuentros armados y desarmados. Es importante que su estrategia sea más económica, sencilla y efectiva pero que proporcione menos peligro y riesgo de lesiones. La simplicidad y la practicidad son aliados importantes para los agentes que quieren aumentar sus probabilidades de sobrevivir en la calle. Esto requiere de un entrenamiento especializado, dejando a un lado las técnicas complicadas de las artes marciales que van más dirigidas a combates limpios y no son prácticas ante criminales.


La defensa personal callejera requiere de un método simple, puede aprenderse a utilizar diversas partes del cuerpo como arma. También es importante saber usar la voz (poder pedir ayuda o saber comunicarse con el agresor), el lenguaje corporal (dar un mensaje de seguridad de sí mismo para reducir la confianza del atacante) y la mente (estar en calma es esencial para tomar decisiones bajo presión y estrés en circunstancias de vida o muerte).

Algunas cosas esenciales que debes aprender:

  • Cómo vencer al atacante con el mínimo de movimientos.

  • Cómo moverte para que no puedas ser golpeado de forma vital.

  • Cómo usar objetos que tengas a tu alcance, como paraguas, mochilas, piedras, etc. para defensa propia.

  • Cómo defenderte cuando estás rodeado.

  • Ante todo mantenerse fuera del peligro y evitar estar cerca de un sospechoso o posible atacante.

Si te interesa aprender más sobre este tema y cómo defenderte, sigue nuestro blog y ponte en contacto con nosotros.


Autora:

Mayevi Hadith Galindo

Co-Fundadora de Academia Young Soo

Guatemalteca

I Dan en Taekwon-Do I.T.F.

Psicóloga y educadora especial


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